miércoles, 20 de mayo de 2009

Un día cualquiera...

Hola, hola... hay alguien ahí??? Ya se que os tenemos acostumbrados a viajes magníficos, aventuras trepidantes y sorpresas mil, pero la vida en Quito también puede llegar a ser divertida... no?

Bienvenidos a nuestro hogar dulce hogar!!!



Esta es nuestra calle, la de la embajada japonesa y la embajada venezolana y no somos "pelucones" (pijos) jejjeje... en el barrio de El Bosque.


Y este es nuestro Edificio Alfa Tennis. Y así llega Marc después del trabajo... pobrecito!


Y por fin... nuestro nidito de amor! La majestuosa SUITE A!!!

El salón y a la derecha la puerta del dormitorio. Tenemos un piano de adorno, bueno de vez en cuando Marc chapurrea alguna canción.



El dormitorio... es tan grande que Marc puede hacer doble salto mortal con tirabuzón... el resto de los detalles os los tendreis que imaginar juas juas... Bueeeeno valeeee... dormimos en camas separadas y que? Es que en Ecuador no está bien visto vivir juntos sin estar casados.



Aquí tenim el menjador i la cuina...


... i el racó dels ordinadors! Ahora ya tenemos mesa de escritorio. A la izquierda está el baño!

Y aquí transcurre nuestra actual agetreada vida. Entre semana trabaja que trabaja... y el fin de semana, como ya no tenemos mucho "$" y hay que ahorrar... ummm que manera de ahorrar más deliciosa!


Que tal un delicioso ceviche de chochos con chulpi, cevollita, un plátano frito y fritada de cerdo por 2$, una cervecita y un heladito por 1,50$, en total un delicioso menú por 3,50$!!! Además en el parque de la Carolina con un sol espléndido de esos que le queman la frente a Marc (que la tiene muy grande) y yo... bueno, yo acabo toda quemada, como siempre!!! Pero procuramos llevar protector solar.


Oye!!! Esos parecen catalanes. Que hacen bailando sardanas en pleno Quito???? Ahhh es el casal catalán... es que estamos en todas partes!!!! Una paellita o una truita de patates 5$ uiiiiii... rasca, rasca... que careros! jejjeje

Y el domingo fuimos a visitar "La Capilla del Hombre", un museo creado por el maestro Guayasamín, sus pinturas hablan de las guerras, la miseria y el dolor de los pueblos americanos. La Capilla está junto a la que fue su casa y el árbol de la vida, donde el pintor quiso ser enterrado.



"YO LLORÉ PORQUE NO TENÍA ZAPATOS HASTA QUE VI A UN NIÑO QUE NO TENÍA PIES", O. Guayasamín.