Estaréis impacientes por saber más de nosotros (o eso quiero pensar, jejee espero que no caigamos en el olvido). La verdad es que con tanto trabajo cada vez se hace mas difícil encontrar un ratito para escribir en el blog.
Bueno, sin más rodeos voy a explicaros como ha ido este fin de semana. Como Marc está estresadísimo con el trabajo y yo superliada con mis proyectos y mis historias decidimos pasar el fin de semana fuera de Quito. Nuestro destino, recomendadísimo, fue Mindo, un pueblito a dos horas en bus. Lo siento por Marc pero voy a contar la historia tal y como fue. El día de antes, volviendo del trabajo:
- Marc cielo, hay que sacar dinero para mañana.
- Bueno... lo sacamos mañana.
- Ok, como veas, pero mañana antes de coger el bus deberíamos sacar dinero, dile a tu padre que nos acerque a un cajero.
- Bueno... y si no ya sacamos allí. (Lógica de Marc: si en Baños, Puyo y Otavalo había cajeros porque no en Mindo? Una buena lógica pero cero previsión, creo que eso debe ser cosas de mujeres.)
- No se, creo que deberíamos sacar dinero por si acaso. (La pesada de Rosa)
(Dejo que él se haga responsable de eso, desde que estamos aquí utilizamos solo su tarjeta de crédito y él es el que se encarga del dinero.)
Al día siguiente camino de la estación Marc no se preocupó de sacar dinero y al llegar a Mindo...
No hay que ser adivinos para saber que sucedió: NO HABÍA BANCOS NI CAJEROS!!!
Ya una vez instalados en un hostal del pueblo comenzamos el primer tour:
Tubbing: Bajamos el rió Mindo subidos en unos neumáticos gigantes. Cuando llegamos al lugar , desde donde comenzaríamos a descender el río, comenzó a llover (pero ya que nos ibamos a mojar en el rió pues no importaba). Nos quitamos la ropa, nos pusimos un casco y al agua. Madre míaaaa el agua estaba congelada!!!! Que pena que no pudimos hacer fotos por la lluvia, el río y porque llegamos super justos de tiempo, directos al tubbing. Fue muy divertido y nos ayudó a liberar tensiones. Menchu esto a ti te encantaría es como los rápidos pero de verdad. He encontrado esta foto en google...
Tubbing
Yo preparándome para la aventura!!!
Durante el canopy tampoco pudimos hacer fotos porque la cámara era muy grande para llevarla encima, así que os pongo otra foto del google...
Canopy
Después de esto, ya hacia las 3 de la tarde nos fuimos a comer y a descansar un poquito al hostal. Que día más largo...
Las vistas desde el hostal.
Y por la tarde fuimos a dar un paseo. Mirad que chiva y esa casa a la que se le está cayendo el techo.
Mindo es famoso por su fauna y flora. Cada año hacen recuento de aves y ya van por mas de 400 especies. La verdad es que fue maravilloso ver colibrís revoloteando por encima nuestro y yo tuve la suerte de ver un tucán mientras hacíamos el canopy, era negro y amarillo, precioso! El taxista de los Bancos nos explicó que vienen muchos expertos a estudiar las mariposas, los pájaros o las plantas. Dice que una vez tubo que llevar a unas chicas que estudiaban a las mariposas y que fue lo peor porque contaban hasta las veces que las mariposas hacían pipí.
Por la noche cenita y una cervecita, después un paseo por las calles oscuras de Mindo donde, si te fijas bien, puedes ver las luciérnagas. Núria, las luciérnagas parecían hadas, se iluminaban en la oscuridad y te pasaban por delante de las narices. Después del paseo nos fuimos a dormir agotadísimos.
Y al día siguiente... El segundo tour:
Tarabita y el santuario de las cascadas: A continuación podréis ver por donde pasa la tarabita y en la foto donde salimos Marc y yo fijaos en el tipo que va colgado fuera de la tarabita.
Allá vamos!!!!
Mirad que rincón tan fantástico!
No os perdais el techo del mirador.
Caminito a otra cascada.
Y este rinconcito que? Increíble, no? Pero a ver quien era el valiente que se bañaba, el agua estaba congeladísima.
Aquí una piscina natural. Que ganas tenía de darme un chapuzón pero... no fui capaz ni de meter una pierna.Por último, la visita al mariposario. Aquí nos timaron, nos habían vendido las entradas en el restaurante, con todo el tour y pensamos que serían para visitiar el gran mariposario de Mindo. Cuando acabamos con las cascadas tuvimos que pagar 2,50 dólares (de nuestros preciados dólares), que más un par de platanitos con queso, dos mazorcas de choclo y una botella de agua pues nos quedaban... nos quedaba 1 dólar! jajaja si si 1 dólar. Así que cuando enseñamos nuestras entradas en el mariposario y nos dicen: No, eso no es de aquí, eso está en el pueblo y allí no tienen casi mariposas... ya suelen hacer eso! Pues imaginaros nuestras caras, sin un dólar (bueno, uno si), a 45 minutos a pie del pueblo y con una hora para marcharnos de Mindo en el bus de las 3. Queríamos matar a la mafiosa del restaurante. Por suerte pasó una pareja joven en coche que nos acercaron al pueblo. Una vez allí, claramente me quejé a la susodicha dueña del negocio y como no, fuimos a visitar el mariposario. Y aquí tenéis una muestra de las dos especies de mariposas que pudimos ver.
Y colorín colorado... volvimos a casa en bus y... esta historia se ha terminado!